CompartirAdvertise here Las bolsas mundiales iniciaron la semana con tono bajista y una marcada aversión al riesgo, a medida que los inversores calibran las consecuencias geopolíticas de los recientes ataques estadounidenses contra objetivos nucleares en Irán. El petróleo alcanzó máximos de cinco meses durante la sesión asiática, impulsado por temores a represalias y potenciales interrupciones en el transporte energético. El Brent superó brevemente los 77,80 dólares por barril antes de estabilizarse, mientras que el WTI tocó los 74,68 dólares. El oro también repuntó, ganando 0,4% y superando los 3.380 dólares la onza. En renta variable, los mercados asiáticos fueron los más afectados, con caídas del 0,9% en el índice MSCI regional y una fuerte corrección en Taiwán. En Europa, el STOXX 600 retrocedía más de 0,3%, reflejando el nerviosismo persistente. En EE. UU., los futuros apuntaban a una apertura moderada: el S&P 500 ganaba 0,1% y el Nasdaq operaba estable. “La pregunta es si esta aparente calma del mercado refleja ingenuidad o una evaluación realista del riesgo. Lo sabremos pronto”, señaló Paul Jackson, estratega global de Invesco.Advertise here El foco está en el Estrecho de Ormuz, por donde circula alrededor de una cuarta parte del comercio mundial de petróleo. Cualquier intento iraní de bloquear la vía, advirtieron analistas de Goldman Sachs y JPMorgan, podría disparar los precios hasta los 110 dólares por barril en el corto plazo. Mientras tanto, el dólar mostraba una demanda moderada como refugio, subiendo 1,25% frente al yen y ganando terreno frente al euro. No hubo señales claras de refugio en bonos del Tesoro, cuya rentabilidad a 10 años subía a 4,39%. Pese a las crecientes tensiones, los mercados mantienen bajas expectativas de un recorte de tasas por parte de la Reserva Federal en su reunión del 30 de julio, incluso tras las recientes declaraciones más dovish del gobernador Christopher Waller. Con información de Reuters Navegación de entradas FMI advierte que ataques a Irán podrían desatar efectos globales más allá del petróleo Carlos Rondón: Un Símbolo del Crimen Organizado Venezolano en Miami