CompartirLa Fuerza Aérea Brasileña (FAB) interceptó en la mañana del pasado viernes 19 de diciembre una aeronave modelo Cessna 182P que ingresó de manera irregular a la Zona de Identificación de Defensa Aérea (ZIDA 41), sobre el espacio aéreo del Territorio Indígena Yanomami, en el norte del país, procedente de Venezuela. Tras ser acorralado por los cazas militares, el piloto sospechoso realizó un aterrizaje forzoso y logró escapar. La operación de vigilancia y control fue coordinada por el Comando de Operaciones Aeroespaciales (COMAE) tras la detección del aparato por los radares del Sistema Brasileño de Defensa Aeroespacial (SISDABRA). Para la interdicción se desplegaron cazas A-29 Super Tucano y un avión de alerta temprana E-99. Según informó la FAB, la aeronave volaba sin plan de vuelo y con matrícula no identificada, lo que motivó la activación de las Medidas de Policía del Espacio Aéreo (MPEA) previstas en el Decreto nº 5.144. Durante el procedimiento, los pilotos militares realizaron reconocimiento visual e intentaron establecer comunicación por radio sin éxito. Ante la presión de la defensa aérea, el piloto del Cessna optó por realizar un aterrizaje de emergencia en una pista de tierra ubicada a unos 15 kilómetros al sur del municipio de Amajari, aproximadamente a 60 kilómetros de Boa Vista, estado de Roraima. Posteriormente, la FAB envió un helicóptero H-60 Black Hawk para ejecutar las Medidas de Control Terrestre. Al llegar al sitio, los efectivos encontraron la aeronave abandonada y con daños estructurales producto de la maniobra brusca, pero no lograron localizar al tripulante. Esta acción se enmarca en la Operación ZIDA 41, diseñada para frenar actividades ilícitas y reforzar la soberanía en la Amazonía brasileña. Con información de FAB A petición de nuestra audiencia todos los anuncios publicitarios fueron removidos Navegación de entradas Intentaron ingresar a EEUU con toxina botulínica y rellenos dérmicos falsificados, pero todo salió mal