CompartirUn petrolero ruso sancionado dio la vuelta en su ruta hacia Venezuela después de que un destructor estadounidense interceptara su trayecto cerca de la costa del país, según el seguimiento de petroleros de Bloomberg, lo que plantea dudas sobre si Washington podría intervenir para recortar la ayuda energética de Moscú a Caracas. El tanquero ruso SEAHORSE se dirigía a Venezuela para entregar un cargamento de combustible el 13 de noviembre, cuando el destructor estadounidense USS Stockdale (DDG-106) se posicionó en su trayectoria. El buque ruso cambió de rumbo y se dirigió hacia Cuba, mientras que el buque de guerra navegó cerca de las aguas territoriales venezolanas rumbo a Puerto Rico. El tanquero petrolero ruso «Seahorse». Foto: Anton Haas / MarineTraffic El Seahorse ha intentado acercarse a Venezuela dos veces desde entonces, pero ha dado marcha atrás en ambas ocasiones y sigue parado en el mar Caribe. El petrolero formaba parte del suministro energético vital de Moscú que mantiene a flote el régimen de Nicolás Maduro a pesar de la presión occidental. Su retirada marca un posible cambio en la estrategia estadounidense, pasando de vigilar los buques sancionados a bloquearlos activamente. El petróleo ruso ha sido el oxígeno económico de Venezuela mientras ambas naciones se coordinan para evadir las sanciones. Si la Armada estadounidense empieza a interceptar los envíos, Putin pierde un cliente y Maduro se queda sin combustible. Lea más en Bloomberg A petición de nuestra audiencia todos los anuncios publicitarios fueron removidos Navegación de entradas Paralelismos entre la invasión a Panamá y las maniobras de EEUU frente a Venezuela Pete Hegseth dice que designar al cártel venezolano como organización terrorista traerá «nuevas opciones» a la administración