Desaparición Forzada de Militares Venezolanos: El Caso de César Girón y Milagros Molina

El mayor del Ejército César Alejandro Girón Contreras y su pareja, la sargento (Ej) Milagros Katherin Molina Ceballos, se encuentran en desaparición forzada desde la madrugada del 13 de abril, cuando funcionarios de la Dirección General de Contrainteligencia Militar (DGCIM) irrumpieron en su hogar en el estado Aragua y los llevaron sin explicación. Este caso ha generado preocupación entre los defensores de derechos humanos y ha puesto de relieve las tácticas represivas del régimen de Nicolás Maduro.

Detención y Desaparición

César Girón, originario del estado Táchira, es un oficial de la Policía Militar adscrito a una unidad en Aragua. Su pareja, Milagros Molina, también forma parte de las fuerzas armadas y estaba prestando servicio en San Cristóbal. La pareja fue detenida en su vivienda en Santa Rita, Maracay, y desde entonces, sus familiares no han tenido noticias concretas sobre su paradero.

A pesar de que se les ha informado que Girón se encuentra en la DGCIM, no han recibido ninguna prueba de vida, llamada o visita. En un giro inquietante, dos comadres de Milagros fueron también detenidas y acusadas de conspiración, aunque posteriormente fueron liberadas. Durante la incursión, los funcionarios incautaron los teléfonos de la pareja, lo que ha dificultado aún más la comunicación con sus familiares.

Un Patrón de Represión

Este no es el primer episodio de desaparición forzada que enfrenta la pareja. En septiembre de 2024, César y Milagros fueron detenidos por primera vez debido a mensajes de un familiar militar retirado que contenían amenazas contra el régimen. Este tipo de represalias, conocido como «sippenhaft», es una táctica de castigo colectivo que se utilizó durante el régimen nazi para responsabilizar a los familiares de los acusados.

La aplicación de «sippenhaft» en Venezuela fue denunciada en septiembre de 2021 por la Misión de Determinación de los Hechos sobre el Caso Venezuela, presentada ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU. Este patrón de represión ha llevado a que muchos ciudadanos vivan en un estado constante de miedo y ansiedad.

Promesas Incumplidas y Torturas

La DGCIM había prometido a la familia de Girón y Molina que serían presentados ante un tribunal, pero esa promesa nunca se cumplió. En una breve llamada, Girón contactó a su ex pareja, madre de sus dos hijos, para informarle que sería presentado, pero esa presentación nunca ocurrió.

La familia ha revivido la pesadilla de la primera detención, cuando ambos fueron llevados por funcionarios de la DGCIM sin justificación. En esa ocasión, la detención se debió a una publicación en redes sociales hecha por el esposo de una cuñada de Girón, quien había desertado del Ejército y se encontraba en el extranjero.

Durante su primera detención, la DGCIM no encontró evidencia que comprometiera a la pareja, solo conversaciones familiares. Sin embargo, la experiencia fue traumática, y la familia no supo nada de ellos durante tres meses, tiempo en el que sufrieron torturas físicas y psicológicas.

Liberación y Nuevas Amenazas

El 28 de diciembre de 2024, César y Milagros fueron liberados, pero no sin condiciones. Se les obligó a firmar un documento que afirmaba que habían sido detenidos el día anterior y que habían sido tratados con respeto a sus derechos. La pareja, temerosa de las repercusiones, firmó el documento, deseando salir de la situación en la que se encontraban.

A pesar de su liberación, la pareja no pudo escapar de la sombra del régimen. Girón, al intentar reintegrarse a sus funciones, fue asignado a una unidad militar en Maracay, donde se encuentra actualmente con Milagros, quien está embarazada de su segundo hijo.

La desaparición forzada de César Girón y Milagros Molina es un reflejo de la represión sistemática que enfrenta la oposición y los miembros de las fuerzas armadas en Venezuela. Este caso pone de manifiesto la necesidad urgente de que la comunidad internacional actúe para proteger los derechos humanos en el país. La situación de la pareja es un recordatorio escalofriante de las tácticas brutales utilizadas por el régimen de Maduro para silenciar a quienes se atreven a desafiar su autoridad. La lucha por la justicia y la verdad continúa, mientras sus familias esperan respuestas y el regreso seguro de sus seres queridos.

Origen: INFOBAE