El gobierno demócrata evacuó inmediatamente al personal diplomático el primer día del estallido de la guerra civil, pero dejó varados a miles de ciudadanos norteamericanos que quedaron atrapados en el campo de batalla.
Los enfrentamientos entre el Ejército de Sudán y el grupo paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido en la capital sudanesa y otras ciudades del país está escalando a una guerra civil abierta entre dos facciones del actual régimen militar.
En este contexto, numerosos países lanzaron planes de evacuación de su personal diplomático y de sus ciudadanos en el país africano. Según datos oficiales de la Organización Mundial de la Salud (OMS) del domingo, más de 420 personas murieron y 3.700 resultaron heridas en los primeros días del enfrentamiento.
Si bien países como Arabia Saudita han sacado a toda su gente, Estados Unidos solo ha podido evacuar a sus funcionarios diplomático de Jartum, suspendiendo las operaciones de la Embajada en Sudán.
Simon Ateba, corresponsal jefe de Today News Africa en la Casa Blanca con foco en el análisis de las relaciones africano-estadounidenses, atacó en su cuenta de Twitter al presidente Joe Biden por no ocuparse de los ciudadanos norteamericanos que todavía siguen en suelo sudanés.
El periodista informó que hay, al menos, 16.000 estadounidenses registrados en Sudán, además de un número desconocido de ciudadanos no registrados, aún varados en el territorio en conflicto.
El gobierno de Biden solo se ha preocupado por evacuar al personal gubernamental, ignorando a miles de norteamericanos que estaban viviendo en el país africano. Una situación que recuerda a muchos a lo que ocurrió en Saigón en la década del 70s tras la retirada de tropas hacia el fin de la Guerra de Vietnam, pero más recientemente, en la salida de Kabul tras la toma del poder de los talibanes en Afganistán.
“Suspendemos temporalmente las operaciones de la Embajada de Estados Unidos en Sudán, pero nuestro compromiso con los sudaneses y con el futuro que quieren no tiene fin”, aseguró Biden, quien dijo estar “orgulloso” del trabajo efectuado por el personal estadounidense en la legación diplomática, expresando su gratitud tanto al personal militar como al personal propio de la Embajada.
“Esta trágica violencia en Sudán ya ha costado la vida de cientos de civiles inocentes. Es inconcebible y debe parar. Las partes beligerantes deben implementar un alto el fuego inmediato e incondicional, permitir el acceso humanitario sin obstáculos y respetar la voluntad del pueblo de Sudán”, afirmó el mandatario norteamericano.
Además, Biden señaló en el comunicado, difundido por la Casa Blanca, que Etiopía, Yibuti y Arabia Saudita fueron “decisivos” para que esa salida se produjera con éxito, pero no informó si hay esfuerzos internacionales para evacuar a los ciudadanos.
Sobre los ciudadanos estadounidenses que han quedado varados, Biden reconoció que hay esfuerzos en curso pero no dio mayores detalles, y la prensa asegura que por el momento, ni un civil ha sido evacuado por la Casa Blanca con éxito.
Sin embargo, cabe aclarar que con la Embajada de los Estados Unidos ahora cerrada, coordinar la evacuación de los ciudadanos estadounidenses restantes se vuelve cada vez más difícil.
El cierre de la embajada y la falta de planes de evacuación para el personal no gubernamental ha provocado preocupación entre los familiares de los varados en Sudán. Muchos se han acercado a periodistas como Ateba, expresando sus preocupaciones sobre sus familiares, colegas y pastores atrapados en la creciente crisis.
A medida que la situación bélica en Sudán empeora, la necesidad de un plan de evacuación rápido y completo para todos los ciudadanos estadounidenses se vuelve cada vez más urgente. Por ello, la administración Biden enfrenta una creciente presión para actuar con decisión y garantizar la seguridad de sus ciudadanos en el extranjero.
Mientras tanto, Francia ha comenzado la “operación de evacuación rápida” de sus ciudadanos y del personal diplomático, según el Ministerio francés de Relaciones Exteriores. “La operación incluye a los ciudadanos de esos estados y al personal diplomático europeo”, agregó el ministro.
Por su parte, el Primer Ministro británico, Rishi Sunak, ha celebrado a media tarde la salida del personal diplomático del Reino Unido y de sus familias, en una evacuación “compleja y rápida”. Sin embargo, tampoco han sido rescatados el resto de ciudadanos británicos. Por ello, el ministro de Exteriores, James Cleverly, ha aconsejado a los británicos que están en Sudán que se refugien en lugares cerrados e informen de su paradero.
“Seguimos buscando cualquier vía para poner fin al derramamiento de sangre en Sudán y garantizar la seguridad de los ciudadanos británicos que permanecen en el país”, ha declarado el líder del Partido Conservador.
España y Corea del Sur ya tienen en Yibuti aviones preparados para sacar del país a ciudadanos y personal cuando la situación lo permita. También han anunciado evacuaciones China, Turquía y Países Bajos.
Por su parte, Alemania está en proceso de evacuar a unos 200 ciudadanos, e Italia prevé la salida en breve de unos 140 nacionales junto a otros tantos ciudadanos de Suiza, el Vaticano y otros países europeos. “Estamos trabajando para que al final de la noche podamos garantizar que todos los italianos que quieran irse estén a salvo”, dijo el ministro de Asuntos Exteriores italiano, Antoni Tajani.
Mientras, el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, ha anunciado en Twitter que la “primera evacuación” de diplomáticos de la Unión Europea y ciudadanos ha arrancado.
El pequeño Estado de Yibuti, en el Cuerno de África, a unos 1.300 kilómetros de la capital sudanesa, se ha convertido en la gran base logística de los países para la evacuación. Según afirmaron desde la Administración de Biden, Yibuti está considerando usar su inteligencia y medios de vigilancia y reconocimiento para analizar posibles rutas de salida y detectar amenazas, y se está evaluando utilizar “recursos marítimos” en el puerto de Sudán para potencialmente poder ayudar a los estadounidenses que lleguen allí.
A última hora del sábado, Arabia Saudita también confirmó haber concluido la evacuación al haber trasladado a 157 de sus ciudadanos, así como a algunos de otras nacionalidades. Kuwait también adelantó que había iniciado la operación de la salida de 300 personas, mientras que Egipto ha empezado a sacar a ciudadanos de Puerto Sudán y Wadi Halfa.
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