Los falsificadores imprimieron 330.000 billetes de la moneda estadounidense que querían intercambiar en la frontera ecuatoriana
En Saraguro, un cantón ubicado al sur de Ecuador en la provincia de Loja, el Servicio Secreto de los Estados Unidos y la Policía ecuatoriana encontraron a una organización delictiva que imprimía dólares falsos. La moneda estadounidense también es oficial en Ecuador. En el operativo se allanó una vivienda y se detuvo a cuatro personas: un ecuatoriano y tres extranjeros.
La fábrica de impresión de billetes estaba en San Pablo de Tenta, una parroquia del cantón Saraguro, allí se asientan 18 comunidades, habitadas por indígenas. En el lugar se imprimían billetes de USD 20 y USD 100. Según las investigaciones, los sospechosos operaban en tres ciudades del Ecuador: Loja, Quito y Tulcán. Los detenidos intercambiaban los dólares falsos en las fronteras del país.
El cantón Saraguro es considerado uno de los pueblos mágicos de Ecuador. Allí se asienta la etnia milenaria de los indígenas saraguros. De acuerdo con el Ministerio de Turismo de Ecuador, “esta tierra milenaria se ha destacado no solo por ser un pueblo lleno de cultura y tradiciones”, de acuerdo con los testimonios de los vecinos del lugar, el allanamiento que realizaron los agentes de la Policía los tomó por sorpresa.
Según la Fiscalía General del Estado, las pesquisas permitieron que se encuentre la que han calificado como “la primera fábrica de billetes falsos en el Ecuador”. La institución judicial indica que “con su desmantelación se frenó la circulación de dólares falsos en el país y la región”.
En la vivienda que se allanó, los agentes encontraron equipos sofisticados como dos máquinas litográficas, una máquina de rotograbado, varias planchas litográficas. Además, tenían 16.600 soportes de papel similares a billetes de 20 dólares americanos, una contadora de billetes, dos terminales móviles, dos computadores portátiles y otros 51 artículos considerados como “varios”.
:quality(85)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/infobae/I74RQQBSOJGY5OELXFGYJNYKE4.jpeg 992w)
Los billetes falsos iban a intercambiarse en la zona fronteriza.Las autoridades estiman que los delincuentes querían imprimir alrededor de USD 500.000, de acuerdo a los materiales confiscados. El objetivo de los falsificadores era hacer circular los billetes de dólar en la zona fronteriza de Ecuador durante el siguiente mes. Aunque no alcanzaron a imprimir el medio millón de dólares que estiman las autoridades, en la incautación, los agentes policiales decomisaron USD 332.000 billetes falsificados.
Los sospechosos declararon su participación en la impresión de billetes falsos, por lo que se dictó una sentencia de 20 meses de prisión para las cuatro personas, según informó la Fiscalía Nacional del Estado. La institución también indicó que para encontrar a los falsificadores se realizó una investigación conjunta con el Servicio Secreto de los Estados Unidos y la Fiscalía de Colombia.
En Ecuador, el delito de falsificación de moneda y otros documentos se encuentra tipificado en el artículo 306 del Código Orgánico Integral Penal y es sancionado con pena privativa de libertad de cinco a siete años. En este caso, explicó la Fiscalía en un comunicado oficial, se aplicó una sentencia reducida debido a que los procesados se sometieron a un procedimiento abreviado, aceptando su responsabilidad en el hecho imputado.
Luego de capturar a los culpables de falsificar dinero en Saraguro, la Policía Nacional decomisó más de USD 500.000 billetes falsos en la ciudad de Santo Domingo de los Tsáchilas, a más de 500 kilómetros de donde se encontraba la fábrica allanada.
Los billetes decomisados tenían la denominación de USD 100. Los detenidos, todos de nacionalidad colombiana, en las primeras versiones que rindieron ante la Policía, dijeron que esos billetes falsos tenían como destino la ciudad de Guayaquil. A pesar de ello, los sospechosos no indicaron cuál fue el origen de los billetes ni cómo los obtuvieron. Los dos detenidos, que trasladaban los billetes falsos en una caja de cartón, fueron puestos a órdenes de la autoridad competente.
